jueves, 10 de julio de 2008

Revelado

El fotógrafo se había especialzado en retratar cadáveres; era la costummbre de época recordar a los difuntos de esa manera tan impúdica.
Sin embargo, algunos muertos se enredaban en los maleficios de la fotografía. Esto quedaba evidenciadado al revelar los rollos y notar, por ejemplo, que el finado estaba boca abajo. Mejor dicho: se había volteado entre el momento de la toma y el momento del revelado.
Los verdaderos profesionales, optaban por mentir y decdirle a los deudos que la foto no había salido.
Los valientes en cambio, consultaban con las brujas o con los curas.
En ambos casos la respuesta era la misma: los que se revelaban boca arriba descansaban en el paraíso junto al eterno, mientras que los otros caían hasta el infierno viendo como se quemaban con sus propios ojos.

2 comentarios:

laveron dijo...

ufff!
muy bueno y corto y con miedito!

G4þRI€L dijo...

ud sabe que sus comentarios son de los pocos que me interesan, asi que ...gracias!